Mercedes Formica-Corsi Hezode nació en Cádiz el 9 de agosto de 1913 en el seno de una familia burguesa, ese mismo año se añadía al nomenclátor la calle donde vio la luz por primera vez: Avenida Wilson, hoy llamada Benito Pérez Galdós, hija de José Formica-Corsi y Amalia Hezode Vidiella. Vivió una infancia dura debido a la amarga relación matrimonial de sus padres que terminó en divorcio y que le sirvieron de incentivo para lograr quebrantar prohibiciones sociales y culturales entonces tabúes para las mujeres.
Hizo sus primeros estudios en el colegio de las Esclavas del Sagrado Corazón en Cádiz, en las Escolapias de Córdoba y en el Sagrado Corazón de Sevilla. Comenzó sus estudios universitarios en la Facultad de Derecho de Sevilla en 1931, recibiendo duros ataques por parte de una sociedad clasista y remisa a ver a una que accedía a este nivel de formación y donde tenía que acudir junto a una protección para no recibir ataques físicos.
Tuvo que interrumpir la carrera debido a la Guerra Civil de 1936, continuándolos después de la contienda en Barcelona y Madrid acabando en 1948, antes se doctoró en Filosofía y Letras en 1945, ejerciendo finalmente como abogada, una de las tres juristas que entonces había en Madrid, renunciando a entrar en el Cuerpo Diplomático ya que estaba vetado en aquel tiempo a las mujeres.
Se erigió en la defensora de las causas presuntamente perdidas de las mujeres maltratadas y marginadas no sólo por sus maridos o familias sino también por las leyes de la época. Orientó su lucha por cambiar las leyes que en la década de los cuarenta del pasado siglo otorgaba la hegemonía al hombre en detrimento de los derechos de la mujer, consiguiendo objetivos inimaginables en la legislación de entonces. Fue ella quien consiguió que en los textos legales de la época franquista se cambiara "casa del marido" por "hogar conyugal" lo que contribuyó también a que tras la separación matrimonial la mujer pudiera disfrutar de la casa donde habían vivido ambos cónyuges.
Eliminó también la indigna figura del "depósito de la mujer", un derecho que tenía el marido de depositar a su mujer en la casa de los padres o en un convento, y ayudó a que se limitaran los poderes incondicionales del marido para administrar y vender los bienes matrimoniales, igual que el derecho a las viudas que volvían a casarse a mantener la patria potestad sobre sus hijos. También puso su grano de arena a que en 1981, cuando ya ella comenzaba a sentir los efectos de la larga enfermedad que la llevaría a la muerte en 2002, se promulgara la ley que reconocía la plena igualdad de la mujer en el matrimonio.
Al estar emancipada y con solvencia económica propia, optó libremente por el matrimonio y en 1937 se casó con Eduardo Llosent, reputado intelectual conocido en los círculos de la cultura de Sevilla y Madrid principalmente. Estuvo casada durante 23 años hasta que se separó, declarando la iglesia su matrimonio nulo, volviéndose a casar en 1962 con el empresario vasco José Mª Careaga.
Desde la infancia también tuvo gran inclinación hacia la literatura publicó su primera novela "Bodoque" (Premio Arte y Hogar) a la que siguieron "Monte de Sancha" (Ambientada en la Guerra Civil y finalista del Premio Ciudad de Barcelona) y "La ciudad perdida", más adelante, en "La casa de los techos pintados" vuelve a rememorar la Guerra Civil. Asimismo es autora del prólogo del libro "Los derechos de la mujer contados con sencillez"; y en "La novela del sábado", otras obras fueron "Mi mujer eres tú", "Vuelve a mí", "A instancias de parte" , "¡Peligro de amor!". "El miedo", y la biografía de Pastora Imperio.
Las circunstancias de la época la llevaron a afiliarse a Falange Española, a pesar de ello siguió luchando por los derechos de las mujeres, cosa que nunca estuvo bien vista en el movimiento falangista ni en los círculos donde se movía. Todo ello en unos tiempos en los que probablemente, muchas personas de las que hoy en día la critican no tendrían el mismo valor de defenderlos tal como ella lo hizo en esos momentos.
Murió en Málaga el 23 de abril de 2002, el destino quiso que se conmemorase desde entonces su muerte junto a la de Miguel de Cervantes y William Shakespeare, nos dejó en el llamado "Día del libro".
En octubre de 2015, el Ayuntamiento de Cádiz, de forma sectaria y poco respetuosa con la vida y logros de Mercedes Formica, retiró el busto que tenía dedicado en la calle para colocarlo en dependencias municipales interiores.
¿De dónde están extraídos los datos?
ResponderEliminarDel archivo histórico municipal y de la prensa nacional del día de la inauguración del busto en Cádiz.
ResponderEliminarMuy buen artículo Brigadier. Aunque no conste bibliografía yo doy por cierta la historia y me alegra que pongas el valor la vida de esta mujer, que como tantas otras de forma anónima luchan en un mundo a veces difícil para ellas.
ResponderEliminarRecibe saludos afectuosos
Me alegro leer esta magnifica entrada por el enorme interés que contiene. Conocía de oídas a esta destacada gaditana, sumando tu blog con el mío. los que no la conocieran tienen la oportunidad de hacerlo y admirar a esta singular mujer que benefición a las mujeres de Todos los colores políticos, "chapo". ya me gustaría que los políticos tuvieran alturas de miras, trabajando mucho y para TODOD, que es lo que deben hacer.
ResponderEliminarMe encantó, gracias por compartirlo.